La original pintura del cantonés Lo Yuao

22 agosto, 2012

 

Por Gustavo Ng

Continúa en la Fundación Standard Bank (Riobamba 1274) la exhibición de pinturas del cantonés Lo Yuao, quién se hizo artista en la Argentina.

Las obras pertenecen al segundo momento de su carrera, dedicado a la pintura tradicional china. La muestra ubica en el espacio una paleta de temas clásicos: paisajes de montaña, bambúes, peces, grullas, caligrafía, caballos, tigres, cerezos y peonías.


 

Sin embargo, la historia personal de Lo Yuao traiciona sin su permiso el desdén del arte chino por la originalidad. Era completamente chino, pero no se hizo pintor de pintura china sino en esta remota Cuenca del Plata, y para entonces ya había pasado veinte años absorbiendo camalotes en el agua y mosquitos en la piel, el mate, los argentinos y la humedad perpetua. Ese mundo se le implantó en su pintura china, que debía ser genéticamente incontaminada, tan pura como una flor de loto. La curadora de la muestra, Victoria Tolomei,  hace notar, entre los retratos de caballos, uno que está siendo apialado por un paisano. Las casas junto al agua que lame viejas montañas calvas, se parecen mucho a los ranchos de las islas del Yaguarón. Por su parte, la coordinadora del Área Cultural de la Fundación Standard Bank, Agustina Punte, indica que “los objetos están centrados, lo que es típico de la pintura occidental… hay detalles que revelan cómo el ojo artístico de Lo Yuao se crió en Argentina. Podemos rastrear en esta obra china influencias de algunos maestros de la Asociación Estímulo de Bellas Artes, donde se formó inicialmente”.

Tolomei descubre la potente originalidad de la obra en el uso de servilletas como papel base. “Es una solución muy argentina; Lo Yuao no conseguía papel de arroz e hizo lo que pudo con lo que tenía a mano”.

Los cuadros de la muestra La Frugalidad emergen de una vida liberada de toda fuerza. La estética china le aporta la anulación de la fuerza de gravedad y de la dictadura del tiempo, pero Lo Yuao no está preso de ella. Fue un hombre solo, sin un lugar al que volver, libre en un departamentito del barrio de Tribunales. No podría haber encontrado un lugar más remoto de China, y allí se dio a las imágenes que llenaron por milenos la fantasía visual de los chinos.

 

La muestra está abierta de lunes a viernes, de 10 a 20, en Riobamba 1274, Buenos Aires. La entrada es libre.

Durante la inauguración de la muestra./Foto de Agustina Resta

 

 

Categorías: Cultura

PUBLICAR COMENTARIOS