Luciano Tanto, cónsul en Shanghai: “El desafío es agregar valor a cada momento”

9 marzo, 2022

Por Néstor Restivo

A 50 años de las relaciones bilaterales, el cónsul argentino en Shanghai, Luciano Tanto Clément, dijo a DangDai que “ese medio siglo nos permite hacer un balance y una proyección. Es un hecho relevante para nosotros, lo que incluye por supuesto a la comunidad china en la Argentina.”

El diplomático indicó que el primer punto significativo lo da la excelente relación bilateral que atraviesan nuestros países, lo cual derrama positivamente a todos los niveles. Los buenos términos políticos también se reflejen en el diálogo entre las empresas de ambos países. En 2021 registramos un intercambio comercial de unos 19 mil millones de dólares. Si bien las exportaciones argentinas subieron 15% desde 2020, sigue habiendo déficit. Ahí nuestro desafío es agregar valor en todo momento y trabajamos para eso. En el caso de Shanghai puntualmente, la China International Import Expo (CIIE) es un excelente ejemplo del interés chino en ofrecer alternativas válidas para aumentar sus importaciones, es una feria destinada exclusivamente a importaciones en todos los rubros de interés. En 2021, Argentina contó nuevamente con un stand de 400 metros cuadrados organizado por la Agencia de Inversiones y Comercio Internacional. Pese a la pandemia, que nos limitó, trajimos a unas 30 empresas, en especial bodegas, productos de mar, aceites, limones y alimentos varios.

—¿Qué sectores del intercambio han sido más dinámicos desde el punto de vista de Argentina?, ¿sólo derivados de agronegocios?

—Podemos hablar de dos universos. Uno, en el que la fuerza proviene de la creciente demanda, y el otro, apoyado en nuestro interés nacional y al que, naturalmente, le asignamos los mayores esfuerzos de promoción. En el primer grupo están esencialmente los productos del agro, en general a granel, pesca y proteínas cárnicas. En el otro, servicios y productos con mayor elaboración, industriales o del agro, pero terminados para su venta al consumidor final. Para estos últimos el trabajo de promoción es fundamental. Alrededor de 4,4% de los alimentos que importa China se los vendemos nosotros. Y esa importación de alimentos general de China sube aproximadamente 4% cada año.

—¿Y el objetivo de agregar valor?

—Sabemos que la gran mayoría del intercambio y las exportaciones argentinas se da en commodities que luego son fraccionados, re empaquetados, procesados y demás, en suelo chino. Nuestro objetivo es que cada vez más partes de esta cadena de producción ocurra en la Argentina. Como dije, el nombre del juego es la “agregación de valor,” podemos apuntar a vender el jamón que se encuentra en las heladeras de un supermercado, ser menos ambiciosos y conformarnos con venderles la carne o, simplemente, limitarnos a exportar los granos con los que se alimenta a los cerdos en China. Ahora bien, no sólo de alimentos y bebidas se compone nuestro horizonte exportador. Desde el Consulado en Shanghai participamos de un programa más amplio que lleva adelante la Embajada en Beijing impulsando una agenda en el sector de Servicios Basados en el Conocimiento y de Empresas de Base Tecnológica. Destaco nuestra participación en la CIFTIS, la feria de comercio de servicios más grande de China, donde más de un centenar de empresas participaron de manera virtual desde Argentina, demostrando no sólo el interés sino la potencialidad que nuestro país posee en desarrollo de software, biotecnología, diseño e industrias creativas. Y otro punto de enorme potencial es el turismo. Argentina es un “país natural” y su puerta de ingreso, Buenos Aires, cuenta con algunas ventajas comparativas sobre otros destinos alejados que son de conocimiento general como el fútbol y el tango. Patagonia y Antártida son también destinos muy atractivos para el turista chino más sofisticado.

—¿Cómo está funcionando el hub logístico?

—El Hub Integral de Argentina en Shanghai, como es su nuevo nombre, continúa asistiendo al día de la fecha a casi 50 empresas argentinas en su operatoria, logística y comercialización en el mercado chino. En 2021 se renovó el Memorándum de Entendimiento (MdE) con la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional. Se trata especialmente una herramienta para las PyMEs que quieren entrar a China desde su puerto principal.  La empresa que maneja el Hub es a su vez una PyME china, con personal que habla español y tiene cada vez más contrapartes en la Argentina. El plan es seguir diversificando sus servicios y ampliando sus productos. En pandemia, ha realizado múltiples Webinars en los que ha presentado sus herramientas y ha generado un diálogo sobre la cultura empresaria local para que lo conozcan las PyMEs argentinas. Estos webinars están también integrados por áreas que incluyen a Cancillería, Ministerio de Desarrollo Productivo, Banco Nación, fundación ProMendoza, provincia de Santa Fe, Banco ICBC y Cámara Argentino China.

—¿Que observa del sector privado argentino en cuanto a su deseo real y esfuerzo por llegar a uno de los mayores mercados del mundo? ¿Tienen que aportar más las empresas o dependen de la ayuda del Estado?

—En la actualidad existen empresas argentinas de todo tipo y tamaño operando en China. Las grandes empresas suelen poseer oficinas comerciales o de representación y, en todos los casos, haber hecho pie en China les ha reportado rápidos beneficios. Los requerimientos de asistencia de este Consulado para con ellos suelen ser la emisión de visados, o por ejemplo acompañarlas cuando se presenta algún tipo de negociación que incluye una autoridad pública china, pero en general no participamos de la temática comercial en cuanto las partes tienen una dinámica autónoma. Es por eso que la mayoría de las consultas que recibe la Sección Comercial de este Consulado General provienen de PyMEs. Asistimos y asesoramos a las que desean ingresar a China en general y a la región del Delta del Río Yangtzé en particular. En su gran mayoría nuestras PyMEs desconocen las particularidades de este mercado, la cultura empresarial y las preferencias de los consumidores locales. Nosotros asistimos en entender los certificados sanitarios vigentes, las reglas para el registro en la aduana china, la adaptación al gusto del consumidor chino, el necesario dominio de la venta por plataformas electrónicas, el acceso a listados de importadores, la due dilligence necesaria para evitar las estafas, ayudar a comprender las distintas estructuras de precios, cuáles son las formas de empaquetado que se utilizan, etc. Los empresarios argentinos exitosos en China se muestran cooperativos para transmitir su experiencia y permitir que otros argentinos exporten a este enorme mercado. Y por supuesto, mucha promoción. Una herramienta para ese fin es sitio web Argentina Trade Net.

—¿Qué objetivos tiene el Consulado para 2022 y años siguientes?

—Tras la visita presidencial y los anuncios, nos estamos preparando para un restablecimiento de las relaciones en modo post-pandemia, es por eso que seguimos de cerca los anuncios que tienen que ver con la política sanitaria que instrumenta China. La idea es potenciar todo lo dicho hasta ahora. Este Consulado General es además un Centro de Promoción, contamos con una responsabilidad en cuanto a la asistencia a empresas argentinas y la búsqueda de contrapartes locales para identificar oportunidades de negocios. Recibimos a diario consultas de cuando se estará en condiciones de retomar una agenda de viajes empresariales. El cincuentenario de las relaciones bilaterales puede ser aprovechado por el sector privado, desde anuncios relevantes al diseño de etiquetas conmemorativas. Asimismo, nos encontramos profundizando las tareas de inteligencia comercial que desarrollamos con el objetivo de seguir brindando información de primera mano sobre el movimiento del mercado chino tanto al sector público como privado argentino, en áreas como minería. El 2022 puede ser el año en el que podamos retomar los desplazamientos y, además, encuadrarlo en el aniversario de los lazos diplomáticos. El desafío para este año será modernizar los mecanismos de acceso al consumidor local, expandir la presencia argentina hacia el interior de China y ampliar la red de contrapartes locales para nuestras PyMEs.

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