La agencia oficial de noticias china, Xinhua, entrevista al periodista Gustavo Ng, sobre la realidad en el Tíbet. Las autoridades chinas hicieron “un trabajo descomunal para que los tibetanos cuenten con educación básica, para dar cobertura social a los ancianos y otros sectores vulnerables, para mejorar el acceso a la salud y a la vivienda de toda la población”, dijo el director periodístico de DangDai.

BUENOS AIRES, 22 may (Xinhua) — La liberación pacífica y el desarrollo durante las últimas siete décadas de la región autónoma del Tíbet, en el suroeste de China, es el exitoso resultado de la reforma democrática impulsada bajo el liderazgo del Partido Comunista de China (PCCh), afirmó este sábado el experto argentino Gustavo Ng.

“El Gobierno central, articulando su acción con el Gobierno local y la estructura del PCCh, ha hecho un trabajo descomunal para que los tibetanos cuenten con educación básica, para dar cobertura social a los ancianos y otros sectores vulnerables, para mejorar el acceso a la salud y a la vivienda de toda la población”, dijo el investigador.

Ng dialogó con Xinhua tras la publicación por parte de la Oficina de Información del Consejo de Estado de China del libro blanco “Tíbet desde 1951: liberación, desarrollo y prosperidad”, que analiza la historia y los logros del Tíbet y presenta una imagen panorámica y real de la región.

El 23 de mayo de 1951 se firmó el Acuerdo del Gobierno Popular Central y el Gobierno Local del Tíbet sobre Medidas para la Liberación Pacífica del Tíbet (el Acuerdo de 17 Artículos), proclamando oficialmente la liberación pacífica del Tíbet.

El entrevistado, que es fundador y director periodístico de la revista Dangdai, destacó que el Tíbet es un tema relevante para los argentinos porque ha sido uno de los focos elegidos por la propaganda de Estados Unidos y de otros países occidentales para atacar a China.

“En el año 2019 fui invitado al ‘Foro sobre el Desarrollo del Tíbet’, y en esa visita a la región pude comprobar los efectos de que el Gobierno socialista liberara a una gran parte de su población de un régimen de semi-esclavitud”, afirmó Ng.

“La economía, la política, la religión y el modo de vida se correspondían de un modo dialéctico que resultaba en una suerte de estancamiento histórico. La liberación de los esclavos y la eliminación de un sistema de explotación produjo cambios importantes para el Tíbet”, añadió el experto.

Ng señaló que el desmantelamiento de un sistema esclavista fue un primer acto de democratización y, sobre esa plataforma, la sociedad del Tíbet ha ido construyendo lentamente una democracia.

“Los siglos de esclavitud todavía gravitan sobre las vidas de las personas. Sin embargo, el PCCh nunca ha cejado en el intento de que los tibetanos tomen el destino en sus manos. Para esto, el PCCh se ha abierto a que los tibetanos lo integren y utilicen el aparato para tomar decisiones”, destacó el analista.

El experto destacó que el socialismo ayudó a los ciudadanos del Tíbet a salir de la pobreza, y los asistió para que pudieran unirse al movimiento económico comenzado en la década de 1980, a la vez que ha mejorado la infraestructura de la región, que en un futuro puede beneficiarse del florecimiento de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, al poder comunicarse el Tibet con otras partes de Asia.

“El resultado de lo que los tibetanos han hecho de su vida como parte de la República Popular China es un incipiente desarrollo, mientras se conservan rasgos culturales muy tradicionales, incluida la religión, el idioma, la medicina y otros aspectos que hacen al modo de vida”, concluyó el entrevistado.