China pidió ayer a Japón que ofrezca una explicación precisa, honesta y completa de su posición sobre Taiwán, advirtiendo que “no se aceptará invocar conceptos vagos para evitar abordar la sustancia o intentar salir del paso”, dice el China Daily.

El día anterior el gobierno japonés había emitido una declaración en una reunión del Gabinete diciendo que las declaraciones de la primera ministra Sanae Takaichi en el Parlamento no cambian la posición de Japón.

El comunicado del Gabinete japonés indicó que “el gobierno mantiene su postura y no consideramos necesaria una revisión ni una reconsideración”.

A principios de este mes, Takaichi indicó que una contingencia en Taiwán que implicara el uso de buques militares y fuerza militar de China continental podría constituir una “situación que amenazara la supervivencia” de Japón, y que las Fuerzas de Autodefensa del país podrían ejercer el derecho de autodefensa colectiva.

En la conferencia de prensa de ayer en Beijing, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores Mao Ning dijo que la repetida referencia de Japón a su posición “consistente” o “inmutable” sobre Taiwán es “poco adecuada”, y que lo que China y la comunidad internacional desean son respuestas a estas preguntas: ¿Qué quiere decir exactamente la parte japonesa con lo que llaman ‘posición coherente’? ¿Acaso Japón sigue aplicando el principio de una sola China?

“Reducir la importancia de la cuestión, plantear ideas no especificadas sin tocar la esencia del asunto y esperar que, de algún modo, el problema se resuelva por sí solo: ese tipo de enfoque ciertamente no llevará a ninguna parte”, añadió Mao.

Beijing considera que las declaraciones de Takaichi constituyen una grave violación del espíritu de los cuatro documentos políticos entre China y Japón, erosionan la base política de las relaciones bilaterales y desafían el orden internacional de la posguerra.