La Asociación de Soja de EE.UU. pidió al presidente Donald Trump que negocie “inmediatamente” un acuerdo comercial con China, después de que este país comprara en Argentina 20 cargamentos de la oleaginosa en solo dos días, aprovechando la eliminación temporal de retenciones que implementó el gobierno de Javier Milei. El Partido del propio Trump también puso el grito en el cielo.

Bloomberg informa que ante la “guerra comercial” entre EE.UU. y el gigante asiático la ASA (sigla en inglés de esa asociación) observó una caída importante en las ventas a China de sus empresas asociadas, lo cual benefició primero a las exportaciones de Brasil y ahora, por el tema impositivo, a las Argentina. Son los tres mercados que proveen a China un producto esencial para ese país como la soja, y que compiten entre sí. De hecho, fue la china COFCO, presente en Argentina y una de las cerealeras fuertes del mercado local, la que más aprovechó el efímero cambio arancelario.

La queja de ASA llegó enseguida al secretario del Tesoro Scott Bessent, quien reclamó el fin de esa eliminación de retenciones en el marco de un acuerdo financiero con Argentina. Milei lo aceptó inmediatamente.

También criticaron el rescate potencial anunciado por Trump en las propias filas republicanas (el Partido del mandatario). “¿Por qué EE. UU. ayudaría a rescatar a Argentina mientras se apodera del mayor mercado de los productores de soja estadounidenses? Deberíamos usar nuestra influencia en todo momento para ayudar a la debilitada economía agrícola. Los agricultores familiares deberían ser la prioridad en las negociaciones de los representantes de EE. UU.”, declaró por ejemplo el senador Chuck Grassley (republicano por Iowa) el jueves.

Ya habían protestado, obviamente, los opositores Demócratas.