Presidentes latinoamericanos participaron antes de ayer en Honduras en la cumbre de la Celac. En el marco de la guerra comercial de Donald Trump, China buscó en el evento estrechar lazos con la región.

La IX Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) congregó a 33 países, pero solo asistieron 11 jefes de Estado o Gobierno, entre ellos Luiz Inácio Lula da Silva, de Brasil, Claudia Sheinbaum, de México y Gustavo Petro, de Colombia. También estuvieron los presidentes de Bolivia, Luis Arce; Cuba, Miguel Díaz-Canel, Guatemala, Bernardo Arévalo, Uruguay, Yamandú Orsi. y Haití, Leslie Voltaire. Los demás países fueron representados por funcionarios de menor categoría.

“Lo fundamental es que estarán los tres principales países [Brasil, México y Colombia] que tienen capacidad de enfrentar el tema de los aranceles”, indicó el rector de la Universidad para la Paz de Costa Rica, Francisco Rojas.

La propuesta mexicana fue “diversificar mercados”, adelantó. La presidenta Claudia Sheinbaum sostuvo que debe haber “mayores pláticas para la integración y ayudarnos entre nosotros”.

Una delegación de China encabezada por Qu Yuhui, el número dos de Asuntos Latinoamericanos de la cancillería, mantuvo desde el lunes encuentros bilaterales con delegados de 15 países.

China planea realizar una conferencia ministerial con la Celac el 13 de mayo en Beijing. “Nuestro presidente Xi Jinping va a estar presente en la inauguración y va a discursar”, dijo Qu.

La delegación china programó encuentros con Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, México, Panamá, Surinam, Uruguay, Venezuela, Bahamas, Barbados y San Vicente y Las Granadinas, según fuentes diplomáticas.

En un contexto en el que Estados Unidos desarrolla una agresiva campaña de arancelamiento que apunta a China y abarca a todo el mundo, “China tiene la mesa servida para aumentar su influencia en América Latina, es un regalo de Estados Unidos”, dijo el analista peruano de relaciones internacionales Francisco Belaunde.

“China quiere aparecer ahora como un socio confiable que está a favor del libre comercio, quiere aprovechar el desbarajuste generado por Trump y la molestia de todos los países por estos aranceles”, agregó.

Antes del cónclave, el canciller hondureño, Enrique Reina, había anticipado que se tratarían temas ligados a la energía, a la seguridad alimentaria y el café.