Lo que dejó la CIIE, según una firma argentina presente en todas las ediciones
Por Francisco Perez Lehmann, para DangDai. El domingo 10 de noviembre concluyó la China International Import – Expo, donde Argentina estuvo en tres stands.
Se trata de un evento comercial de alcance global que reúne a exportadores de todo el mundo interesados en introducir sus productos y servicios en el mercado chino. Desde 2018, el Ministerio de Comercio de ese país y el gobierno local de Shanghái han sido los encargados de abrir el mercado chino a proveedores extranjeros de todo tipo.
La Exposición Internacional de Importaciones de China contó con pabellones dedicados a mercancías provenientes de los más alejados puntos del planeta, tres de ellos exhibieron productos de origen argentino. Uno estuvo a cargo del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), dedicado exclusivamente a la promoción de carne argentina. Los otros dos correspondieron al stand institucional y al pabellón organizado por la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional (AAICI).
La organización de estos pabellones fue posible gracias al trabajo conjunto de empresas importadoras y entidades gubernamentales argentinas, tales como la Embajada en China y la AAICI.
La foto de apertura refleja ese trabajo conjunto: se ven de izquierda a derecha, en la CIIE 2024.: Juan Pazo (secretario de Industria y Desarrollo Productivo de la Nación), Felipe Ye Min (importador de la bodega San Pedro de Yacochuya), Macarena Santos Muñoz (Banco ICBC), Marcelo Suárez Salvia (embajador argentino en China) y Mariano Perel (Banco ICBC). ,
Este tipo de ferias constituye una oportunidad única para que empresas de nuestro país hagan visible su oferta exportable y logren insertarse en el mercado local.
La Expo CIIE no es la única que se celebra en China; existen otras oportunidades clave para operadores argentinos. En lo que concierne a importadores argentinos de productos chinos, destaca la “Canton Fair” o Feria de Cantón, que se realiza dos veces al año en la ciudad de Guangzhou. Esta feria se especializa en una amplia gama de bienes exportables, desde maquinaria y electrónica hasta bienes de consumo y textiles. También es relevante la feria “SIAL China”, que se lleva a cabo cada mayo en Shanghái, centrada en el sector de alimentos y bebidas, con el objetivo principal de promover la innovación y el comercio en el sector agroalimentario. Además, la Cancillería argentina organiza periódicamente misiones comerciales y rondas de negocios, ofreciendo oportunidades específicas que coadyuvan a fortalecer los vínculos comerciales entre ambos países.
La experiencia de Royma
La empresa Royma Trading Ltd., fundada en 2018 por los socios chino-argentinos Matías (Qxiang Cao) y Fanny Villamayor, ha participado en la feria CIIE desde su inauguración el mismo año. Si bien su oferta exportable dio comienzo en este mercado con el vino de Consorcio de Bodegas de Altura, actualmente la empresa ha diversificado su portafolio, incluyendo productos como carne vacuna y porcina, yerba mate y alfalfa.
Cada año se suman nuevos productos y nuevas empresas para explorar oportunidades de negocio. Después de más de una década de experiencia en comercio con China, Royma se destaca por su compromiso con la calidad de los bienes intercambiados y su capacidad de adaptación a las demandas de este exigente mercado. Actualmente, la empresa es una referente en el acompañamiento de compañías en su proceso de inserción y consolidación en el mercado chino, tanto en sus estratégicas en materia de exportación como de importación.
Con oficinas en Buenos Aires y Shanghái, Royma se destaca por su equipo íntegramente “argen-chino”, reflejando la estrecha conexión comercial entre ambos países. La trayectoria del grupo se ha ido construyendo a fuerza de constancia en la presencia y de cultivar relaciones comerciales con permanencia en el tiempo, logrando de ese modo una imagen empresarial sólida y confiable. Aun ante las peores adversidades, la empresa ha sostenido sus vínculos con socios chinos. Durante la pandemia, cuando el mercado atravesaba uno de sus peores momentos, fue una de las pocas compañías argentinas que siguió exportando e importando distintos productos al país asiático.
Desde 2017, Royma exporta vinos de la bodega San Pedro de Yacochuya a Felipe (Ye Min), importador chino que participó por séptima vez consecutiva en la Expo CIIE en Shanghái.
En los últimos años, China se ha posicionado como líder mundial en innovación tecnológica, integrando estos avances tanto en la oferta de productos tecnológicos, en experiencias de consumo de la vida cotidiana y en materia de difusión y distribución de bienes y servicios. El visitante extranjero queda sorprendido por instrumentos que modifican las experiencias diarias como los programas de “WeChat” que permiten fotografiar productos y encontrar opciones de compra al instante. Del mismo modo, cuando se visita alguna de las ferias antes comentadas se puede apreciar la creciente presencia de productos que contienen la última tecnología disponible, sorprendiendo particularmente los robots futuristas que se encargan de una multiplicidad de servicios.
En un mercado en constante expansión, China se consolida como un motor clave en la tecnología global con oportunidades crecientes para empresas argentinas interesadas en integrar sus cadenas de valor.
China puede parecer una cultura muy lejana y distinta a la Argentina, pero siempre existen elementos comunes que nos acercan. Fanny Villamayor, fundadora de Royma Ltd., nos destaca que tanto en la comida de su querida provincia de Salta como en distintos puntos de China se consumen patas de pollo preparadas de manera similar y se utilizan hojas de maíz como envoltorio de exquisitos platos tradicionales. Poder identificar estas coincidencias resulta esencial para tomar partido de ellas desde la óptica comercial, del mismo que entender las diferencias es clave para adaptarse al siempre cambiante mercado asiático.
Una diferencia cultural relevante en materia comercial es que en China los importadores no suelen especializarse en un solo producto, sino que mantienen en sus canastas múltiples bienes. Eso hace que, si confían en un proveedor y ya han hecho negocios para comprar vino por ejemplo, es probable que le soliciten también carne o cuero si lo necesitan. Es clave para las empresas argentinas continuar cultivando vínculos con los importadores y aprovechar al máximo futuras oportunidades que puedan presentarse. En este sentido, la experiencia de Royma le permite cumplir con un rol relevante de tutor o guía, ayudando a empresas argentinas a realizar sus primeras operaciones comerciales, adaptarse a condiciones particulares del mercado y acortando brechas culturales complejas.
En mercados como el chino, se estima que es crucial consolidar una estrategia de “marca país” que refleje una presencia continua y unificada, apoyada por la colaboración entre el sector privado y las agencias de comercio exterior estatales. Este enfoque debe combinar la participación activa en eventos internacionales con la promoción de los valores distintivos de Argentina, como su compromiso con la sostenibilidad y su rica herencia cultural. Posicionar a Argentina como un país que valora sus distintas cualidades artísticas y culturales y que se encuentra comprometida con el cuidado del medio ambiente no solo fortalece su identidad, sino que también le permite diferenciarse en un entorno altamente competitivo, abriendo mayores posibilidades de crecimiento a largo plazo.
China, un país con una historia milenaria y un mercado moderno e inmenso, se abre al mundo y presenta desafíos de proporciones a quienes deseen transformarse en proveedores o necesiten de sus bienes y servicios. Las empresas argentinas tienen allí un destino de primer orden y algunas ya cuentan con una amplia experiencia y trayectoria capaces de mostrar el camino del éxito.
PUBLICAR COMENTARIOS