Las exportaciones de pollo, menudencias bovinas y porcinas y porotos negros son algunas de las enfrentan dificultades para ingresar a China.

La avicultura es el caso más crítico. A principios de 2023, por la aparición de la gripe aviar en el país, se cerró el mercado chino que, para los exportadores de carne de pollo, representa unos 160 millones de dólares, casi la mitad del total de los envíos al exterior.

En agosto de ese año, la Organización Mundial de la Sanidad Animal le otorgó nuevamente a la Argentina el estatus sanitario como país libre de influenza aviar. Desde entonces, las naciones importadoras comenzaron de a poco a reabrir los envíos (casos Chile o Brasil, por ejemplo), pero en Argentina, por diversas razones burocráticas (pero en un contexto donde las relaciones políticas entre Buenos Aires y Beijing no han sido las mejores desde que asumió Javier Milei) se demora, además de que preocupa la baja de precios, informa La Nación.