El Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales y China Institutes of Contemporary International Relations celebraron el martes un encuentro virtual entre sus miembros y académicos.

En la apertura, los titulares de ambos think tanks Francisco de Santibañes y Wang Mingyie  coincidieron en las posturas comunes de ambos países en torno a la paz, el desarrollo, el apoyo a reclamos soberanos mutuos y la necesidad de fortalecer la relación económica. Wang recalcó lo “crucial del momento” mundial, con conflictos armados en Ucrania y otros lugares y “países que quieren revivir una ‘guerra fría’”y, en ese marco, los “desafíos de países emergentes como China y Argentina, pero también las oportunidades”. Y De Santibañes dijo que las coincidencias históricas entre ambos países alientan la continuidad de mejores vínculos. Luego, la parte china formuló varias críticas y dudas a la experiencia “libertaria” en el Gobierno argentino.

Asistieron ambos embajadores, Wang Wei desde Buenos Aires y Marcelo Suárez Salvia desde Beijing, quienes también repasaron brevemente la relación bilateral y abogaron por su mejoramiento y más intercambios como este.

Por parte del CARI participaron autoridades (también la vicepresidenta Carola Ramon Berjano) y miembros tanto del Comité de Asuntos Asiáticos (su director Jorge Malena) como del Grupo de Trabajo China (su coordinador Ernesto Fernández Taboada), los tres dando su visión del escenario actual, en tanto el CICIR convocó también a algunos de sus académicos, como Ni Jianjun, quien habló de “China: Nueva etapa de desarrollo de alta calidad”, y Sun Yanfeng, quien lo hizo sobre “La relación China-Argentina en la nueva era”, entre otros.

Mirada china sobre Milei

Sobre esto último, Sun dijo que se ha entrado en una nueva fase y que en la próxima reunión del Partido Comunista de China habrá más llamado a apertura, pero que “el presidente (Javier) Milei representa una incertidumbre para las inversiones chinas en Argentina, que se ha enfocado en áreas como ferrocarriles, caminos, energía”. Tal stock inversor, dijo, “requiere una confianza política sólida y vemos que con Milei ha bajado mucho respecto de los gobiernos del peronismo y de (Mauricio) Macri”. Agregó que “antes alcanzábamos un consenso como socios naturales, complementariedad económica, deseos similares, reclamos mutuos de soberanía. Pero con Milei no se alcanza esa perspectiva. Las inversiones de largo plazo no tienen perspectiva”, siguió su crítica. “Las empresas chinas quieren una certeza y no la ven. Y otra incertidumbre –agregó- es que las fuerzas externas sobre Argentina, de Estados Unidos y otros países, tienen influencia y sus comentarios afectan la cooperación china-argentina, por ejemplo en Tierra del Fuego”.

Según el académico del CICIR, “nosotros creemos que esa cooperación tiene  beneficio mutuo y estamos dispuestos a fomentar eso. Hay una base muy sólida. La cooperación puede tener mayor espacio y esperamos en algún momento recuperar el ritmo con herramientas como el swap, las obras hidroelectricidad, el proyecto de energía nuclear, trenes… Nosotros no intervenimos en asuntos internos de otros países. Esperamos que Argentina logre estabilidad política en su país para que su transformación avance igual que las reformas en China y encontremos ese camino”, expresó.

BRICS, Mercosur y pobreza

En otra intervención, se mostró decepcionado por la salida de los BRICS+ por parte del gobierno de Milei y preguntó sobre posibilidades futuras de que esa decisión se revea. Desde el CARI, el co-coordinador del grupo China Julio Sevares fue escéptico al respecto, al menos durante el actual gobierno, dijo, e indagó sobre beneficios concretos que podría tener Argentina en caso de ingresar, por ejemplo a través del Nuevo Banco de Desarrollo. Otro tema planteado por Sevares fue la eventualidad de un Tratado de Libre Comercio, en tanto otro intercambio se dio entre Gustavo Ng del mismo grupo y los académicos del CICIR sobre la lucha contra la pobreza, sobre lo cual la parte china detalló como un eje importante el mejoramiento del nivel de vida a través del abaratamiento de bienes de consumo con alta tecnología, para mayor acceso de la población.

En otra parte del seminario virtual, Yang Shouguo hizo referencia a las “relaciones estructurales” entre China y Argentina, retomando algo que había dicho Ramon Berjano como estratégica. Para Yang, “eso no cambiará ni por ideologías ni por presiones externas”. Y habrá que “buscar nuevos puntos, oportunidades, fuerzas motrices, para fomentar el desarrollo mutuo”.

Sobre la labor de ambos think tanks, se trabajó en la idea de fomentar más trabajos conjuntos para ayudar a ambos gobiernos e incorporar nuevas temáticas. Gustavo Martínez, del CARI, formuló el cierre de la actividad coincidiendo con ese propósito por un “diálogo constructivo y fructífero”.