Una vez más el Papa manifestó su deseo de visitar China y dijo que “es un país grande, admiro a China, la respeto. Es un país con una cultura milenaria, con capacidad de diálogo. Creo que China es una promesa y una esperanza para la Iglesia. La cooperación es posible”.

Francisco agregó que “también trabajamos con buena voluntad a la hora de nombrar obispos. Escuché por la Secretaría de Estado cómo van las cosas y estoy satisfecho”, informó AICA.

La Santa Sede no tiene relaciones diplomáticas con China, aunque en 2018 se firmó un acuerdo provisional sobre el nombramiento de obispos con la República Popular, que deberá renovarse este otoño.

El Papa también indicó que espera la ayuda china para desarrollar una perspectiva de paz en la guerra de Ucrania, destacando que su representante especial para Ucrania, el cardenal italiano Matteo Zuppi, tiene relaciones con China.