El primer ministro chino Li Qiang reclamó impulsar “un mundo multipolar igualitario y ordenado” y “una globalización económica inclusiva”, en clara oposición al modelo pretendido por la OTAN y el G7, quienes insisten en imponer un modelo basado en reglas unilaterales sustentadas en prácticas “hegemónicas e intimidatorias”.

“El posicionamiento que Li Qiang detalló en su presentación prevé una mayor presencia de China a nivel internacional, promoviendo cambios en la gobernanza global”, analiza Jorge Elbaum en Página12. Repara en una frase del gobernante chino, el segundo en importancia luego del presidente Xi Jinping: “si Estados Unidos no pisa el freno y sigue acelerando en el camino equivocado, no habrá barandillas suficientes para prevenir el descarrilamiento, que devendrá en un situación muy conflictiva”.