El presidente del Brasil, Lula da Silva, ya está en Beijing, donde fue recibido por su par Xi Jinping. Firmarán varios acuerdos comerciales, financieros y científicos tras el paso del mandatario sudamericano por Shanghái ayer.

Allí tuvo su primera jornada en China, donde asistió a la jura de Dilma Rousseff como titular del Nuevo Banco de Desarrollo (NBD) de los BRICS, visitó las empresas Huawei y CCCC y mantuvo otras reunión políticas. Antes de viajar a Beijing criticó al FMI y la preponderancia del dólar en el comercio global.

Lula dijo, reporta Página12: “Hoy un país necesita correr detrás del dólar cuando podría exportar en su moneda propia” (…) ¿Por qué un banco como el de los BRICS no puede tener una moneda que pueda financiar la relación comercial entre Brasil y China, entre Brasil y otros países de los BRICS?”.

El Nuevo Banco de Desarrollo, formado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, es decir los BRICS, es presidido por la ex presidenta brasileña Rousseff.

Al  hablar de créditos multilaterales, Lula también aprovechó para lanzar también duros cuestionamientos contra el FMI aludiendo a acusaciones de que la institución con sede en Washington impone cortes draconianos al gasto público en países en dificultades como Argentina a cambio de préstamos.

“Ningún gobernante puede gobernar con un cuchillo en la garganta por el hecho de que el país sea un deudor. Los bancos multilaterales deberían poner tolerancia en cada renovación de acuerdos. El sueño de crear los Brics era crear un instrumento de desarrollo (…) No se puede estar asfixiando a los países como está haciendo ahora a la Argentina con el FMI y como hacían con Brasil y otros países”, disparó.

Brasil ya no debe nada al Fondo desde el primer gobierno de Lula (en paralelo, Argentina había hecho lo mismo con Néstor Kirchner, pero luego Mauricio Macri contrató  un programa crediticio récord de 45 mil millones de dólares, que ahora Argentina se ve en figurillas para cancelar sin siquiera haber visto ningún beneficio por esa deuda).

AQUÍ, el discurso completo de Lula ante el Banco de los BRICS, donde dijo, entre otras cosas: “Por primera vez se establece un banco de desarrollo de alcance global sin la participación de países desarrollados en su fase inicial. Libres, por tanto, de las cadenas de las condicionalidades impuestas por las instituciones tradicionales a las economías emergentes. Y más: con la posibilidad de financiar proyectos en moneda local.”

El mandatario brasileño, que ofreció otras declaraciones sobre los lazos entre su país y China, entre ellas de hacer comercio en reales y yuanes, en una entrevista con la agencia oficial Xinhua, visitó en Shanghai un centro tecnológico de primera línea de Huawei, vanguardia mundial en 5G y 6G y atacada por Estados Unidos en la disputa global, donde el anfitrión fue el jefe de la compañía Liang Hua; una planta de BYD (autos y buses eléctricos, que hay en Argentina y otros países latinoamericanos), donde lo recibió su CEO Wang Chuanfu, y las instalaciones de China Communications Construction Company (CCCC), donde fue agasajado por el presidente del consejo de dirección, Wang Tongzhou. Es la empresa que trabaja en el segundo puente Chaco Corrientes en nuestro país.

Antes de ir a Beijing, también tuvo una cena con el secretario general del Partido Comunista de Shanghai, Chen Jining.

En la capital china verá al presidente da Assembleia Popular Nacional, Zhao Leji, al primer ministro  Li Qiang y firmará hoy acuerdos con el Presidente Xi Jinping.

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