El miércoles 19 comenzó el Seminario internacional de formación académica “Escuela de Primavera (Argentina) Otoño (China) – Cultura, creatividad y desarrollo: un diálogo abierto entre China y América Latina”, organizado por la UBA y el ICUBA, con una conferencia del profesor Waldo Ansaldi.

Presentado por el director del Instituto Confucio de la Universidad de Buenos Aires, Patricio Conejero Ortiz, y por las coordinadoras, Verónica Flores y Verónica Giordano, Ansaldi habló de “Una mirada no eurocéntrica de los vínculos históricos entre China y América Latina”.

Referenciándose en textos de, entre otros, el italiano Giovanni Arrighi, el francés Serge Gruzinski y en otras fuentes, bajo el paradigma del largo plazo trabajado por Fernand Braudel, comenzó recordando la epopeya del almirante Zheng He y las diferencias, en términos de objetivos de conquista, con los exploradores de Europa en el siglo XV. Eso, para arrancar con la historia de los vínculos entre China y nuestra región.

Como otra crítica al eurocentrismo, habló de la continuidad de miles de años de la civilización china hasta hoy, largamente ignorada en los estudios que se hacen desde América Latina. Y dentro de ese recorrido, reparó en el impacto fundamental que tuvieron sus numerosos inventos en diversos campos para toda la humanidad.

Ansaldi habló luego de la política actual, en términos de cierta moda con “el engaño y la mentira”, cotejando pensamientos clásicos de China como los del estratega militar Sun Tzu.

Teniendo el proceso de mundialización siempre como fondo, el disertante ubicó las distintas dinámicas chinas en nuestro tiempo así como su acercamiento con América Latina (continente que también da al Pacífico, recordó, criticando la mirada excluyente que suele tener el atlantismo en ese sentido), uniendo los viejos caminos de la ruta de la seda con el actual proceso de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, así como, en los siglos XIX y XX, las coincidencias en las luchas anticolonialistas. En el siglo XIX, contra el imperio británico básicamente en China (guerras del opio e invasiones de potencias occidentales y luego de Japón) y contra el dominio de España y Portugal en el caso de la región latinoamericana. Asimismo, hizo referencia a las migraciones coolíes (semi esclavos chinos) a varios países de las Américas. Y en el siglo XX, sobre todo en los años ‘60s, aludió a las coincidencias entre algunos sectores de izquierda en América Latina que simpatizaron con el maoísmo en tiempos del desencanto o directamente el enfrentamiento con la Unión Soviética.

Sobre la actualidad, Waldo Ansaldi hizo comentarios sobre los vínculos crecientes entre el país asiático, en su relevante rol global, con todos los países de América Latina y el Caribe, y en la ronda de preguntas se refirió a diferencias teóricas y conceptuales entre imperialismo (propio del capitalismo), conquista, territorialismo y expansión. También, al desafío de la actual vinculación sino-argentina para evitar modelos anteriores de relaciones que no favorecieron a nuestro desarrollo, sobre lo cual apuntó en especial al rol (que juzgó negativo) de la burguesía local y al papel que pueden jugar las políticas de Estado del poder de turno, advirtiendo cierto pesimismo en avanzar hacia un sendero más conveniente si no mejoran esas circunstancias.

El ciclo sigue según ESTE PROGRAMA.