El analista argentino Gabriel Balbo destacó este viernes la creciente influencia de la moneda china en el mercado mundial.

Balbo dijo a la agencia Xinhua que, como moneda de reserva, “si bien el yuan actualmente sólo representa poco más del 2,5 por ciento del total de las reservas mundiales de los países (quinta moneda de reserva a nivel global), viene creciendo en su participación en las carteras de los bancos centrales”.

Analista de Relaciones Económicas Internacionales, Tecnología y Geopolítica y director del Centro de Estudios para el Desarrollo (Espade), Balbo estimó que “para que una economía se considere confiable, es determinante que cumpla con condiciones de estabilidad de fondo, que la sustenta una sólida generación de Producto Interno Bruto (PIB), de estabilidad financiera, que la otorga un sistema bancario sólido, de estabilidad normativa, con un conjunto de leyes y reglas claras que sustenten los negocios y, por último, un horizonte de crecimiento razonablemente favorable. El presente de la economía china presentaría todas estas condiciones, atrayendo la inversión privada y el interés de los Gobiernos en respaldar sus sistemas financieros eventualmente con yuanes”.

Xinhua sostiene que según datos de la Composición Monetaria de las Reservas Oficiales de Divisas (COFER, por sus siglas en inglés) publicados por el FMI, la demanda de activos en renminbi ascendió a 336.100 millones de dólares en el último trimestre del 2021, representando el 2,79 por ciento del total de las reservas de divisas asignadas.

Hacia finales del año pasado la participación del yuan como moneda de reserva aumentó respecto al 2,66 por ciento del tercer trimestre del 2021 y se ubicó en el quinto lugar detrás del dólar estadounidense, el euro, el yen japonés y la libra esterlina.