En su discurso de hoy 1º de marzo de apertura del año legislativo, el presidente Alberto Fernández hizo referencia a su viaje reciente a la República Popular China y anunció que “ayer he recibido la confirmación del gobierno chino de que han accedido a nuestro pedido de ampliación y uso del swap en función de lo expresado en la ‘declaración conjunta’ que firmáramos en mi visita oficial”.

Y agregó que “China siempre nos ha apoyado en los momentos difíciles, y confiamos en que pronto tendremos la autorización técnica correspondiente.  Con ello también fortaleceremos la estabilidad cambiaria”.

Argentina tiene actualmente el equivalente en yuanes a unos 20 mil millones de dólares, casi la mitad de sus reservas monetarias internacionales. Lo que se vino negociando en estos meses, como se informara en este portal, fue la activación o ejecución de una parte de esos fondos -que mientras no se toquen, solo son un respaldo a las reservas monetarias internacionales sin costo- pagando una tasa de interés al Banco central chino sustancialmente menor a lo pactado en el origen del contrato, que ronda el 6 a 7% de interés anual según la tasa interbancaria de referencia, que en este caso es la Shibor de Shanghai. Los detalles se conocerán en los próximos días, dijo Fernández. Al mismo tiempo, se ampliará en torno a 15% el sotck de yuanes. Ya al finalizar el viaje a China a principios de febrero, la vocera presidencial Gabriela Cerruti había informado que la ampliación del swap monetario iba a ser del equivalente a 3 mil millones de dólares.

El swap se firmó originalmente en 2009 y fue renovado y extendido luego en 2013 y 2017, esta última vez durante el gobierno de Mauricio Macri, quien ejecutó una parte por primera vez. En 2020, volvió a prolongarse por tres años.

Un uso del nuevo swap podría darse en el plano comercial, donde Argentina tiene un fuerte déficit con China y a muchas empresas se les complica cobrar en sus monedas de origen. Una idea que trascendió es que parte del nuevo intercambio monetario sirva a esos fines sin pasar por la conversión a dólares.

Hubo, en el discurso del jefe de Estado, otras dos menciones a China. Una cuando dijo que “hoy, entre los países con más de 30 millones de habitantes, Argentina exhibe los mayores porcentajes de vacunación en un podio que comparte con China y España. Debajo de nuestros porcentajes aparecen potencias mundiales como el Reino Unido, Estados Unidos, Alemania y Rusia, todos ellas productoras de formulaciones autóctonas de dosis contra el Covid-19”.

Otra, al aludir a la compra de vacunas Sinopharm y expresar que “la Argentina compró vacunas creadas o producidas en Rusia, China, India, Estados Unidos y países de Europa. Y, además, comenzamos a producir en el país algunas de esas vacunas”.