El gobierno de Estados Unidos convocó a una “Cumbre por la Democracia”, cuya “invitación es especialmente útil a los intereses de los secesionistas taiwaneses”, escribe el economista Gustavo Girado.

En La Ruta China, el director del posgrado sobre China en la Universidad Nacional de Lanús sostiene que “se corre un serio riesgo de arruinar cualquier posible recuperación de los vínculos entre China y EE.UU., que se estaban pretendiendo más intensos con la idea de ‘bajar los decibeles’ ante la importante serie de encontronazos”.

A la cita, el presidente Joe Biden invitó a Egipto, Arabia Saudita, Jordania, Qatar o Emiratos Árabes Unidos, pero no a China ni Rusia, ni a Venezuela, Cuba, Nicaragua, Bolivia o Singapur, indica el autor de la nota para marcar el sesgo polémico de una convocatoria para conversar de democracia.