Abundan estos días opiniones sobre cómo China y Occidente abordan de modo diverso la crisis sanitaria. Recogemos aquí las de Byung-Chul Han (foto), Gustavo Ng, Jorge Aleman y Hoenir Sarthou.

El filósofo Byung-Chul Han escribe en El País de España sobre las implicancias globales del Covid19, del rol de las fronteras en la era del big data y de cómo los países asiáticos están gestionando la crisis de una forma más eficiente que Occidente.

En Ad Sina, el director periodístico de DangDai Ng describe la sinofobia desatada por información falaz y prejuicios desde que China informó del brote epidémico, la figura del murciélago como sinónimo de suerte en el país asiático, y plantea que la ahora pandemia -que “pareciera ser incipiente y menor en China, enorme y estructural en Occidente” – pondría “en juego una redefinición del Estado, posiblemente en cada país, pero todos sin poder desatender el referente monumental del Estado chino”.

El psicoanalista argentino Aleman escribe en Página 12 sobre los abordajes de la pandemia en ambos territorios. Mientras en Occidente el neoliberalismo rompió el tridente economía de mercado, liberalismo político y vida democrática civil, China, “a pesar de también estar atravesada por el Capitalismo”, quizá “sea el único mundo que aún mantiene un principio civilizatorio de orden para ofrecer”. El presidente Alberto Fernández le pidió a su par de China, Xi Jinping, el envío de unos 1.500 respiradores que ese país no utilizaría debido a la baja de casos de coronavirus.

Por su parte, el periodista y dirigente político uruguayo Sarthou escribió en el Samanario Voces que el miedo hará más daño que el mismo Covid19, y se pregunta sobre los porqué del alarmismo global con bombos y platillos, el apartamiento de lo que siempre se ha entendido como prudente en casos de calamidades o catástrofes colectivas, respondiéndose que esa pregunta lleva a la otra cara del coronavirus: los graves efectos políticos, económicos y sociales que tendrán, afirma, las actuales políticas de prevención.