La Cámara Argentina China publicó un comunicado de solidaridad con China frente a la epidemia sanitaria que sufre -ahora ya con alrededor de 1.300 muertos en un nuevo conteo oficial-, así como con la comunidad sino-argentina. “Una porción minoritaria de la prensa –dijo en un párrafo- ha difundido noticias atemorizantes que en nada contribuyen a mantener la calma de la población mundial. Es deseable que esas noticias apocalípticas desaparezcan de los titulares y que se difundan solo informaciones provenientes de fuentes confiables”. También condenó los hechos de discriminación. En Leer más, el comunicado completo

–Por Cámara Argentina China de la Industria, la Producción y el Comercio

Es verdad que la epidemia provocada por el Coronavirus, que comenzó en la ciudad de Wuhan y se diseminó luego por otras ciudades chinas es grave. La cantidad de afectados lo demuestra, aunque el porcentaje de decesos se mantiene por debajo del 3% de los enfermos.

El sector de la población que más muertes acusa es el de adultos mayores, especialmente aquellos que sufren de alguna enfermedad preexistente, lo que los hace las sensibles y más expuestos a contraer la enfermedad.

Es también verdad que el Estado Chino ha reaccionado con rapidez, tomando todas las medidas aconsejables para estos casos, incluso aislando a Wuhan y otras ciudades vecinas para evitar una diseminación más veloz de la enfermedad.

Los pronósticos provenientes de fuentes médicas chinas indican que el “pico” máximo de la epidemia podría presentarse a fines de Febrero o comienzos de Marzo, esperando posteriormente un descenso de la tasa de crecimiento de infectados.

Una porción minoritaria de la prensa ha difundido noticias atemorizantes que en nada contribuyen a mantener la calma de la población mundial. Es deseable que esas noticias apocalípticas desaparezcan de los titulares y que se difundan solo informaciones provenientes de fuentes confiables.

Por otra parte algunos amigos de origen chino nos refieren que han notado ciertas actitudes discriminatorias que, aunque minoritarias, no por eso son menos reprochables. No se debe perder de vista que actuar con precaución ante una enfermedad no implica discriminar ya que el coronavirus puede afectar a todos los seres humanos.

El problema entonces a vencer es el coronavirus y no una comunidad, como es la china, que en nuestro país está compuesta de aproximadamente 180.000 personas (no hay estadísticas muy exactas al respecto), quienes ejercen mayoritariamente el comercio en forma lícita y pacífica. Ya se han instalado como una de las tantas comunidades extranjeras que contribuyen a la conocida frase según la cuál nuestro país es “un crisol de razas”.

Todos tenemos muy cerca de nuestros domicilios un comercio con propietarios de origen chino y todos reconocemos el tesón con que ellos trabaja los siete días de la semana, no importando si es un día feriado y manteniendo abierto el local por lo menos doce horas diarias, siendo un ejemplo de laboriosidad y esfuerzo.

Le pedimos a toda la comunidad china nuestras sinceras disculpas por las conductas discriminatorias que puedan haber sufrido de otras comunidades de este país, porque entendemos que la desinformación provoca miedo pero ello de ninguna manera autoriza a actitudes totalmente reprochables de algunos, pocos, compatriotas nuestros.