Veintitrés universidades chinas presentaron sus planes de becas
Argentina y China presentaron ayer en la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA la Primera Feria de Educación Superior China, con impulso de los ministerios de Educación de ambos países y para “promover un mayor intercambio educativo entre China y Argentina y ampliar el conocimiento mutuo de nuestros pueblos con vínculos que sean de largo plazo”, según señaló en la apertura del acto el subsecretario general del Consejo chino de Becas, Wang Shangang, quien informó que su país el año pasado envió a estudiar al exterior a 600 mil universitarios chinos y recibió 450 mil universitarios extranjeras. Las cifras de intercambio con Argentina son muy modestas frente a tales guarismos, pero todos coincidieron en que la maquinaria ha comenzado a moverse en especial por impulso y recursos chinos, aunque en los pasillos se reconocía una traba indisimulable: los problemas en el otorgamiento de visas más bien del lado argentino.
Vinieron a Buenos Aires 23 universidades chinas a presentar ofertas y en el acto inaugural hablaron, además de Wang, el consejero cultural de la Embajada china, Yang Chuanying; el director de Cooperación Internacional de la cartera educativa nacional, Francisco Miguens; el rector de la Universidad Jauretche de Florencio Varela como integrante del Consejo Interuniversitario Nacional, Ernesto Villanueva, y Ricardo Pahlen Acuña, decano de Económicas.
Además de esas organizaciones, impulsaron la jornada el Centro Latinoamericano de Estudios de Política y Economía China (Clepec) y la Asociación de Ex Becarios Argentina China (Adebac), cuyos presidentes Francisco Cafiero y Gonzalo Tordini estuvieron presentes.
El consejero Yang dijo que “la educación es un sector muy importante de la Asociación Estratégica Integral que tienen nuestros dos países” desde 2014 y valoró la labor de los dos institutos Confucio (en la Universidad de Buenos Aires y en la Nacional de La Plata), así como de universidades públicas y privadas”. Sostuvo que la Feria podría verse como “el preludio de la visita que hará el presidente Xi Jinping a la cumbre de líderes del G-20 el 30 de noviembre y visita de Estado a Argentina el 2 de diciembre para que estas acciones sirvan de plataforma para profundizar el conocimiento mutuo que pueden trasladar de un país a otro profesores y estudiantes”.
Villanueva habló de la importancia histórica de las universidades, a lo largo de siglos, en propiciar la modernidad y nutrirse del conocimiento de otros. “Estas Ferias sirven para que nuestros países tan lejanos sin embargo se conozcan más mediante becas de intercambio”, afirmó.
Miguens, por su parte, enumeró una serie de avances recientes como los acuerdos educativos firmados por el presidente Mauricio Macri con Xi en 2016 y 2017, continuidad de los acordados durante el kirchnerismo: la “formación el año pasado de una subcomisión de Educación en la Comisión” de seguimiento de los acuerdos que hay a escala binacional; el “aumento de 8 a 40 becas de posgrado en estos dos años” y la incorporación también de “becas para idioma, para lo cual actualmente se está implementando una mejora en el reconocimiento de los exámenes de validación nacional de nivel del español y del chino (CELU y HSK respectivamente) en cada país”.
Luego Acuña dio la bienvenida, se prodigaron regalos mutuos autoridades de ambos países y en cada stand de las universidades visitantes (de muchas y diversas regiones de China, en general grandes casas de estudio, como Peking University, Fudan University, Beijing Language & Culture University (BLCU), Nanjing University, Zhejiang University y Beihang University) se intercambiaron información de becas y planes de estudios con pares locales y muchos estudiantes que se acercaron interesados.
Más allá de las buenas intenciones, varios señalaron por lo bajo que muchas veces ellas chocan con trabas cuanto menos burocráticas de autoridades argentinas, en el área de Migraciones, para otorgar becas de estudio a universitarios chinos. Y recientemente también se han observado cambios del lado chino en el sistema general de visado que no condicen con la idea de una mayor flexibilización y facilitación de becas, según algunos testimonios.
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