Todavía no se sabe qué pudo pasarle a Sun Zhong Qin
Los médicos forenses no confirmaron aún si un cuerpo hallado el sábado en Ezeiza pertenece a la mujer china desaparecida hace casi 20 días al salir del aeropuerto internacional. Los resultados de la autopsia permitirán determinar el día y la causa de muerte, así como también la identidad de la persona fallecida, aunque “eso dependerá del grado de conservación de sus huellas dactilares”, señalaron las fuentes policiales.
El hijo de Sun Zhong Qin reconoció que el sweater que lleva la persona es de su madre pero no pudo reconocer el cadáver, y habrá más comparaciones de ADN. Trascendidos en medios creen que se trataría de Sun. Pero hasta el cierre de esta edición no se había logrado avanzar en la identificación. En tanto, un grupo de familiares y conocidos de Sun expresaron su preocupación y se manifestaron en el barrio de Belgrano (foto).
Por lo pronto, el estudio preliminar reveló que el cuerpo no presentaba lesiones ni otros indicios sobre la causa de muerte. La necropsia se realizó el domingo en la Morgue Judicial de Lomas de Zamora.
La señora Sun, que había llegado desde Shanghai, salió del aeropuerto de Ezeiza y caminó en contramano por la autopista Riccheri. En el vuelo, testigos dijeron que presentaba signos de confusión y devarío.
Por la falta de indicios concretos para identificar el cuerpo, se tomaron diversas muestras para realizar estudios complementarios en los laboratorios de la Suprema Corte de la provincia de Buenos Aires y de la Policía Científica en La Plata.
Los forenses estimaron la data de muerte en 15 o más días anteriores al hallazgo del cuerpo y advirtieron que la talla y el peso del mismo, así como algunas de las prendas que lo cubrían, coincidían con las de la mujer desaparecida.
El cadáver fue hallado a unos 300 metros de donde aparecieron las pertenencias de Sun -gracias a una pareja que paseaba su perro por el lugar-, a siete kilómetros del aeropuerto internacional y a metros de la autopista Ricchieri.
De acuerdo con la información que brindó su familia, la mujer vive en el barrio de Villa Urquiza y ya lleva una década residiendo en el país.
El 19 de enero llegó de Shangahi a Ezeiza a las 22.45 en el vuelo TK 015 de la empresa Turkish Airlines, pasó por Migraciones a las 23.39 y se la vio salir de la Terminal A a las 4.30 de la madrugada del 20, cuando un hombre de camisa blanca la acompañó hasta la puerta, según imágenes de las cámaras de seguridad. Tambien se vieron imágenes de ella en la cinta de búsqueda de equipajes. Pasajeros del vuelo dijeron que había manifestado síntomas de confusión. Algunos investigadores creen que pudo haber tenido un ACV que fue progresando con las horas.
Más tarde, Sun pasó por un galpón próximo, donde parecía desorientada. Allí habló con un hombre y siguió caminando hacia la zona de bosques. Red Solidaria y referentes de la colectividad china se movilizaron por ella, junto a su familia. También buscan a la persona de camisa o remera blanca que la habría acompañado hasta la puerta del aeropuerto tras que ella desembarcara.
Con información de Télam recogida por diversos medios.
AQUÍ, una actualización del diario Clarín y otra del diario La Nación
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