El Conservatorio Central de Música de Beijing celebró ayer un homenaje a Carlos Gardel, con auspicio de la Embajada argentina en esa ciudad. Se interpretaron obras como Mi Buenos Aires querido, Melodía de arrabal y Tomo y obligo, entre otras.

El embajador Diego Ramiro Guelar y su esposa Viviana Fontanini, el consejero cultural de la Embajada argentina Juan Cortellletti y el experto en tango, periodista y traductor Gaviota Ou Zhanming participaron de la velada, en la que tocó una banda de músicos y 14 cantanes. “La actividad requirió mucho tiempo de preparación, en especial por el esfuerzo de los cantantes para aprender las letras del tango en español”, comentaron en la sede diplomática.

Guelar (en la foto, con Ou Zhanming) destacó el crecimiento del género rioplatense en China, donde hay cada vez más salones de baile, milongas y traducción de libros y canciones. Y recordó que este año justamente se cumplen 100 años de la publicación de otro tango famoso, y el primero cantado, Mi noche triste, de Castriota y Contursi.

“El espectáculo fue notable y el público disfrutó de un espectáculo bien argentino, pero también bien chino, que refleja un ejemplo cooperación cultural entre ambos países”, señalaron en la Embajada.