Según el investigador Rubén Laufer, de la Universidad de Buenos Aires, las asociaciones estratégicas que varios países de América Latina firmaron con China van camino al formato TLC (Tratados de Libre Comercio), a su juicio inapropiados para el desarrollo de la integración regional. “América latina tiene ya para Beijing importancia estratégica como proveedora de alimentos y materias primas, como demandante de manufacturas, bienes de capital y financiamiento, y como destino de inversión”, escribe. Pero la actual y cambiante coyuntura global “reactivaron los interrogantes acerca de la naturaleza y resultados de las alianzas que sectores de las clases dirigentes de América latina vienen estableciendo con la ascendente China, y respecto a cómo inciden las ‘asociaciones estratégicas’ de la región con Beijing sobre la viabilidad y alcances del proceso de integración latinoamericano”.

Nota en el Observatorio de la Política China