¿Por qué hablaron Donald Trump y Tsai Ing-wen?

6 diciembre, 2016

Resultado de imagen para trump tsai

La comunicación telefónica entre Donald Trump y Tsai Ing-wen provocó un pequeño incordio entre Washington y Beijing, más aún porque el presidente electo de Estados Unidos llamó públicamente “presidente de Taiwán” a Tsai, pero, para el catedrático argentino Jorge Malena, “no hubo nada improvisado en la llamada ni fue fruto de una supuesta falta de experiencia política de Trump, ya que ella ocurrió mientras su asesor sobre Taiwán, Stephen Yates estaba en Taipei, y desde allí fue que se comunicaron con Trump”.


Yates fue también asesor del ex vicepresidente y halcón republicano Dick Cheney, en la era de George Bush hijo.

“Quizá el error de Trump fue que, cuando quiso justificar la llamada en un twit, llamó a Tsai ‘presidente de Taiwán’ y el término no es apropiado para un país como Estados Unidos que no reconoce a la isla como estado soberano”, dijo Malena a Dang Dai.

Desde Beijing hubo diversas reacciones a la primera llamada oficial entre un presidente estadounidense y un líder taiwanés en cuatro décadas. Primero el canciller Wang Yi interpretó que era una suerte de truco el llamar para felicitar a Trump por su triunfo y usar al lobby protaiwanés en Washington. Luego la agencia oficial Xinhua recordó los esfuerzos de la República Popular China y EE.UU. para cooperar por la paz. Pero más adelante la oficina de prensa de la Cancillería china presentó una protesta formal y la CCTV y otros medios alertaron de consecuencias negativas por ese llamado. Desde ya, en Taipei celebraron una pequeña victoria política.

“Fue todo calculado –indicó el entrevistado- y podríamos decir que quizá como Trump aún no está en funciones aprovechó para dialogar con Tsai así como hizo con los líderes de Filipinas –que recientemente trató muy mal a EE.UU. y se acercó a China- y a Pakistán”.

Según el director de la Tecnicatura de Estudios sobre China Contemporánea de la USAL, “desde el triunfo de Tsai este año en Taiwán se complicaron las relaciones con Beijing. Ella y su partido representan otra cosa que el partido tradicional Nacionalista (Partido Kuomintang), que había logrado con la RPCh acuerdos comerciales, de turismo, de mayor intercambio y hasta un mecanismo de diálogo cada seis meses. El nuevo gobierno (del Partido Progresista Democrático) no reconoce el llamado Consenso de 1992 donde se habla de ‘Una sola China’ más allá de la interpretación de cada una de las partes. Y desde hace unos meses China redujo vuelos comerciales y enfrió la relación económica. De ahí que la llamada Trump-Tsai podría interpretarse como una jugada de EE.UU. para limitar la presión económica que está ejerciendo China a Taiwán”.

Si bien EE.UU., desde los acuerdos Nixon-Mao de 1971/2, fue recomponiendo relaciones con Beijing y en 1979 directamente dejó de reconocer a Taiepei, obviamente siguió prestándole una gran ayuda militar vía acuerdos en su Congreso como “cooperación en defensa” y como contención en los mares del Pacífico cercanos a China. Por cierto Trump también twiteó, revelando esa hipocresía, algo así como “mientras les vendemos armas no puedo recibir llamadas de felicitaciones”.

Según Malena, “Trump está diciendo que no va a abandonar a Taiwán, parece ser el mensaje”.

¿Significa algo para América Latina este tema? El analista, que lo es también del grupo de estudios sobre China en el Consejo Argentino de Relaciones Internacionales, recordó que desde 1971, por la decisión de Nixon y luego de Naciones Unidas, los países latinoamericanos fueron en general reconociendo a la RPCh. “Ahora que China es primero, segundo o tercer socio comercial e inversor más importante de todos los países de la región, podría repetirse algo a la inversa, aunque mucho más tenue: que tras esta señal del próximo presidente de EE.UU. algunos países latinoamericanos desarrollen más los lazos culturales y comerciales con Taiwán”.

Más sobre el tema en Xinhua, South China Morning Post (en inglés) y El País

PUBLICAR COMENTARIOS