Una misión empresaria de la provincia de Liaoning visitó ayer Buenos Aires y fue recibida por pares de la Cámara Argentina China del Comercio, la Producción y la Industria. La provincia, al noreste chino, en la Manchuria, es una puerta de salida de la industria de base pesada, tecnológica y manufacturera en general que se ha radicado en esa región china a partir del período de reforma y apertura. Los empresarios y autoridades del gobierno provincial y municipal fueron recibidos por el titular de la Cámara local, Carlos Spadone, y otros directivos de la entidad.

Encabezados por funcionarios de Liaoning (el vicegobernador Bing Zhigang y alcaldes de siete ciudades) vinieron en la delegación ejecutivos de rubros como maquinaria y equipos, productos metalúrgicos, petroquímicos, textiles, de granja, minerales, ingeniería ferroviaria, farmacéuticas, industria liviana, materiales de construcción, entre otros.

La capital de la provincia es Jinzhou, en una región que hasta hace pocas décadas “era muy inhóspita sobre todo por el clima pero que ahora se ha convertido en la que tiene una de las mayores infraestructuras de conectividad, con seis aeropuertos y otras vías de comunicación y logísticas muy desarrolladas”, dijo a Dang Dai uno de los funcionarios.