Don Osvaldo (al centro) y su orquesta en la vieja Pekín

Haciendo honor al maestro Osvaldo Pugliese, de cuyo fallecimiento se cumplían ayer justamente 21 años, ese enorme difusor del tango argentino en China que es Gaviota Ou Zhanming (periodista, traductor y escritor radicado allá, pero criado en Buenos Aires) ofreció una clase apasionada sobre el 2 x 4 en el marco del Diálogo Académico Sino-Argentino que organizaron el CLEPEC y el CECLA (ver esta misma página). Pugliese, dijo, fue el iniciador del gusto chino por el tango, con su visita de 1959. Gusto que sigue hasta hoy y que por ejemplo se nutre estos mismos días de una gira que está encarando Rodolfo Mederos.

“Como Pugliese era miembro del Partido Comunista Argentino, fue recibido en China como un verdadero embajador, más cuando no había todavía relaciones oficiales entre ambos países”, dijo Gaviota (la traducción de Ou al español, y nombre español del expositor). De hecho lo atendió el primer ministro Zhou Enlai, al autor de la La Yumba y a los 20 integrantes de su orquesta con sus familiares, en la propia Asamblea Nacional.

“Ahí nació el tango en China y luego de un retroceso en las décadas de 1960 a 1980, a fines de esos años y sobre todo en los ’90 cobró vuelo nuevamente. Pugliese por cierto volvió a viajar en 1989, aunque ese año políticamente turbulento en China no generó el clima más propicio. Pero un CD que llegó de Astor Piazzolla (Alma de Tango) tuvo mucho éxito (también equívocos graves, porque muchos confundieron al gran Astor como el creador del tango) y a partir de ahí el género no paró de crecer”, dijo Gaviota, traductor de libros de Horacio Ferrer, de historia del tango y, ahora, de una biografía del propio  Piazzolla que saldrá, espera, en octubre.

“En el siglo XXI ya hay numerosos hitos de música y de baile. En 2006 en Sanlitún, un barrio de Beijing, un grupo alemán empezó con un local de danza y este año cumplió una década habiendo crecido mucho y sirviendo como ejemplo para otras “milongas”.

Hoy hay 26 ciudades chinas donde se puede escuchar y bailar tango, con milongas semanales o temporales, y sólo en Beijing, 15 clubes, informó.

Desde 2013 parejas chinas participan además del Mundial de Tango que cada agosto se organiza en Buenos Aires, y el mes próximo se batirá el récord de cuatro de ellas compitiendo aquí, luego de haber sido seleccionadas en China.

Al cerrar su conferencia, Gaviota, que también enseña a bailar y es miembro de la Academia Argentina de Tango, sacó su celular y mostró como también a través de la más popular aplicación china, el WeChat, él se las ingenia para difundir a autores argentinos (se vuelca por los clásicos músicos o letristas de la época de oro: D’Arienzo, Di Sarli, Troilo, Manzi, Cadícamo, etc.) con pequeñas biografías o con su música maravillosa. “Recién estoy dando  los primeros pasos de mi camino de difusión”, cierra con humildad.