El gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet, busca con legisladores opositores formar una comisión bicameral que haga el seguimiento del proyecto productivo en torno al acueducto Mandisoví: caminos, redes de fibra óptica y agua potable. Se trata de una demorada obra con inversión china sobre la que hay gran expectativa pero que viene siendo postergada, entre otros factores, por lo complejo de su traza: atraviesa varios departamentos y aun espacios privados. Comenzó con el anterior gobierno provincial (igual que el actual, controlado por el Frente para la Victoria) y ahora se procura consenso con legisladores de la alianza Cambiemos e intendentes. La obra estará a cargo de la CSEC, corporación del Estado chino de Ingeniería y Construcción, y el Banco ICBC. Para el acueducto Mandisoví Chico, en el departamento Federación, está pensada una inversión de casi 200 millones de dólares y empleo puramente entrerriano.

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