Xu Bing ha tenido un lugar preponderante en los últimos 30 años de arte chino. Crea proyectos extremadamente complejos y sistemáticos que a menudo trepan a la gran escala, en instalaciones que llaman poderosamente la atención.

En 1987 desarrolló un vocabulario de 4.000 símbolos que aparecen como caracteres chinos pero carecen absolutamente de significado en cualquier idioma. Talló cada símbolo en un bloque de madera y los pintó a mano completando una serie de volúmenes que carece de todo sentido y es conocida como Libro del Cielo.

Más tarde tatuó un cerdo con sus caracteres y lo puso en un corral con otro cerdo cubierto de palabras sin sentido en el alfabeto latino. La pieza ganó fama cuando comenzó a llevar con él a los dos cerdos a las exposiciones.

Xu también inventó e incluso enseñado el método Caligrafía de la Palabra Cuadrada, un moso de escribir las palabras en inglés en una secuencia de comandos que se parece a los caracteres chinos.

Sus trabajos más recientes se han centrado en cuestiones no lingüísticas, como Phoenix, creado a partir de los escombros de demolición y los materiales encontrados en antiguas obras chinas.