Carlos Moreno, director de Negociaciones Económicas Bilaterales de la Cancillería argentina, que sigue las relaciones con China, detalló las características del país asiático en tanto inversor externo, intentando despejar algunas críticas a esa radicación de capitales que temen una primarización de nuestras economías. Fue durante el desayuno mensual de la Cámara bilateral, en el cual también expusieron empresas asociadas y directivos de la entidad.

Moreno explicó que China es el sexto inversor extranjero directo en el mundo y que, a diferencia de otros países, ofrece proyectos denominados “llave en mano”, es decir, desde el principio hasta el final. Además, marcó tres ítems sobre las características de una nueva forma de intervenir de China en el escenario mundial.

Por un lado, dijo, participará de productos con menor mano de obra intensiva, que “no impliquen primarización económicas para países emergentes”. En segundo lugar, “le interesa intervenir inversiones con productos de mayor valor agregado”, y finalmente, “China es consciente del daño ambiental que causó y tomará medidas en este sentido para revertir la situación”, afirmó.

También aludió a una preocupación del sector sobre las trabas de visado a empresarios chinos, diciendo que la Cancillería argentina está trabajando en flexibilizar un tema que, de todos modos, corresponde a Migraciones.

El desayuno esta vez se celebró en el Hotel Broadway, de la Ciudad de Buenos Aires. Guadalupe Vicari Dell Isola, su directora de Marketing, abrió el evento explicando las bondades de sus instalaciones para los turistas chinos que quisieran visitar el Hotel, entre ellas, lo amplio de sus ambientes, que llegan a 60 metros.

A su turno, Germán Avellaneda, gerente de exportaciones de Pc Arts y Bangho, exportadoras  de productos tecnológicos y alimenticios, cuya facturación anual alcanza los 300 millones de dólares, hicieron la presentación de su firma. Y Roberto Lorenzo, presidente de Olivares Andinos S.A, con sede en la provincia de San Juan, explicó la potencialidad de la industria aceitera, ya que toda su producción está destinada principalmente a China.

Cerró la jornada e director ejecutivo de la Cámara Argentino China, Ernesto Fernández Taboada, quien indicó tres posibilidades sobre el comercio bilateral: turismo, servicios educativos y servicios tecnológicos. Esta última posibilidad, dijo, ofrece la exportación de software. Indicó que el gobierno chino, sin contar las empresas privadas, importó 160 millones de dólares del sector al resto del mundo, y Argentina podría aprovechar gran parte de este mercado.