Carisma y tenacidad son las aptitudes que aporta esta última sensación china a la nueva generación de música clásica. Junto a otros virtuosos del piano del país asiático como los consagrados Lang Lang y Yundo Li, se le atribuye su pertenencia al dream team chino de la música clásica, reconocido y aclamado a nivel mundial. A pesar de corresponder a esa élite musical, ella se atribuye una individualidad y sensibilidad que la hacen diferente. Por esta razón no quiere que la conozcan como la versión femenina de su compatriota Lang Lang al que, por supuesto, admira.

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