El chino nacionalizado argentino venció en la final al mexicano Madrid para consagrarse campeón en los Juegos Panamericanos de Guadalajara, otorgándole a Argentina una séptima medalla de oro y la primera medalla dorada en tenis de mesa. Liu, de 39 años, lleva 14 como profesional. La victoria lo clasifica para Londres 2012.

Con la octava medalla de su cosecha, Liu alcanzó a Walter Pérez como el más ganador de nuestro país en la historia de los Panamericanos. Logró imponerse en una final panamericana después de haber perdido cuatro. “Gané por la experiencia”, dijo, y agregó que “fue uno de los partidos más importantes de mi vida. Yo con esta edad, si no salía campeón hoy, capaz no salía nunca”.

En cuatro Juegos Panamericanos Liu ganó un oro en singles (2011), dos plateadas (1999 y 2007) y un bronce (2003), en singles; en dobles, un bronce (2003), y por equipos, tres plateadas (1999, 2007 y 2011). Participó también en tres Juegos Olímpicos.

Aunque nunca dejó de representar a la Argentina, actualmente está radicado en Francia (tercera mejor liga del mundo, después de la alemana y la china), donde actúa para el SAG Cestas.

Liu evaluó que su triunfo en Guadalajara “le va a servir al tenis de mesa argentino”. Ya invitó a sus compañeros del equipo nacional, Pablo Tabachnik y Gastón Alto, a practicar a un centro de entrenamiento en China y confesó que su sueño es dirigir al seleccionado.

Desde 1999 Liu Song representa a la Argentina. Nacido en Guang Xi, China, llegó a Buenos Aires en 1995 con 27 años, cinco años después que llegara su familia. Había comenzado a jugar a los 9, asistió a un colegio especial para deportistas y se destacó como juvenil. Ubicado en el octavo lugar del ranking en China, trabajó en la lavandería de ropa familiar en el barrio de Floresta. Se aficionó al asado y se hizo hincha de Boca Juniors. El periodista Ernesto Rodríguez cree que era considerado “el crack del laverrap” y Liu explicó: “Mi apellido en China es Liu, pero en la Argentina me dicen Songuito”.

Eugenia Mastri, enviada especial a Guadalajara por La Voz del Interior, relató el festejo de Liu cuando ganó la medalla de oro: “Tiró su paleta, levantó las manos, salió corriendo, saltó dos vallas, se revolcó por el piso, abrazó a su entrenador y gritó con su particular tonada:’Vamos Argentina’”.

Redacción de Dang Dai